Los extremos de la política chilena amenazan a las candidaturas presidenciales moderadas de la izquierda y la derecha
La aspirante comunista, Jeannette Jara, presiona a Carolina Tohá, a tres semanas de las primarias oficialistas. El republicano José Antonio Kast alcanza a Evelyn Matthei, de la derecha tradicional


Cuando faltan apenas cinco meses de las elecciones presidenciales chilenas del 16 de noviembre, donde los chilenos decidirán la sucesión de Gabriel Boric, la carrera hacia La Moneda se torna cada vez más competitiva. A tres semanas de las primarias de la izquierda, que definirán a un candidato único de esta coalición, los sondeos de las encuestadoras Cadem y de Criteria muestran un avance de la candidata comunista, Jeannette Jara, sobre la postulante del Socialismo Democrático, la centroizquierdista Carolina Tohá. En la oposición, en tanto, el candidato de la extrema derecha, el republicano José Antonio Kast, amenaza a la aspirante de Chile Vamos, de la derecha tradicional, Evelyn Matthei, que consistentemente ha sido la favorita para llegar al Gobierno, de acuerdo a los sondeos de hace meses. Tanto Tohá como Matthei, las candidatas moderadas de sus respectivos sectores, comienzan a mostrarse arrinconadas por los extremos.
Cuando Kast empezó a escalar en las encuestas en mayo –luego del retroceso del diputado libertario Johannes Kaiser, de posiciones incluso más a la derecha que el propio Kast– desde la derecha tradicional de Matthei lo tomaron con tranquilidad: sabían que iba a ocurrir aquella huida de apoyos que favorecería al republicano. Advirtieron, eso sí, que si la tendencia se repetía durante tres semanas “sería preocupante”. Y en la encuesta Cadem de este fin de semana recién pasado, Kast finalmente alcanza a Matthei con un 17% de las preferencias, superando por primera vez a la economista (16%) -la diferencia está dentro del margen de error-. En tercer lugar aparece Jara con 8%, un punto arriba que Tohá (7%). En el sondeo de Criteria, en tanto, Matthei sigue como favorita -aunque estancada en el 26%-, mientras que Kast escaló tres puntos, hasta el 20%. Tohá y Kaiser empatan en el tercer puesto con un 8%, mientras que Jara sube de 5% a 7%.
Desde Chile Vamos, la coalición de la derecha tradicional o moderada, reconocen que la semana pasada fue mala para Matthei. Aseguran que el Gobierno de Boric “supo aprovechar muy bien” que la candidata mandara a callar a la portavoz subrogante de la istración, Aysén Echeverry, en un mitin. Fue tal el rechazo que produjo en el oficialismo la salida de libreto de Matthei, que el tema sobre su conducta marcó el debate político y opacó el lanzamiento de su campaña, bajo la frase: “Valentía para gobernar, cercanía para escuchar”. Desde los partido que la apoyan –UDI, RN y Evópoli- aseguran que las posiciones de Matthei son moderadas, incluso más de lo que les gustaría a muchos dentro de la derecha, pero que en las formas, es visceral cuando se enoja. “Es un ítem del que tenemos que hacernos cargo”, apuntan.
Aunque les gustaría que el escenario en las encuestas fuese distinto, están confiados en que ese 30% de gente que dice no saber por quién votar, se va a decantar por una opción moderada, ajena a los extremos y experimentos, cuando lleguen a las urnas en una elección con voto obligatorio. Además, en la derecha tradicional sostienen que Kast puede dar la impresión de un hombre serio, pero que la marca republicana y lo que transiten en el Congreso sigue siendo el de una extrema derecha y que en la campaña parlamentaria, junto a los libertarios y socialcristianos, probablemente más de uno puede decir alguna locura sobre las vacunas o el cambio climático.
En Chile Vamos, sin embargo, aseguran que todo está muy sujeto a quién gane las primarias de la izquierda. Tienen una estrategia si gana Jara y otra distinta si triunfa Tohá. Si gana la candidata comunista, confían en que la izquierda moderada se inclinará por Matthei. Y falta poco tiempo: la campaña presidencial chilena 2025 arranca la noche del 29 de junio, cuando se conozca el resultado de la primaria de la izquierda.
En el oficialismo, en tanto, reconocen que hay episodios que han tensionado la campaña. Jara, por ejemplo, evaluó a la abanderada del Socialismo Democrático y su excompañera de gabinete, con una nota 5 de 10 por su desempeño como ministra del Interior. El periodista político Ascanio Cavallo reflexionaba en una columna publicada en La Tercera este domingo que Jara está haciendo con Tohá lo que Kast hace con Matthei: “Golpearla donde más le duele, atacarla en forma sorpresiva, llevar al límite la solidaridad entre candidatos de un mismo sector”.
El escritor sostiene que es un hecho que Matthei “no ha encontrado aún la forma de hacer frente a esta ofensiva, aunque también es cierto que su campaña se ha desarrollado en forma morosa, precavida, defensiva”. “Tampoco Tohá, mucho más activa, ha hallado el modo de frenar las embestidas de Jara; en sus últimos encuentros hasta se ha declarado sorprendida”, apunta.
Por su parte, el candidato del Frente Amplio, Gonzalo Winter, tercero entre los cuatro candidatos de izquierda, según los sondeos, ha dicho que el discurso de Tohá “manifiesta una cierta nostalgia con los años 90”, en referencia a la transición democrática. La frase cayó mal en el comando de la centroizquierda. Defienden que Tohá fue la segunda autoridad del presidente Boric –fue su ministra del Interior desde septiembre de 2022 a marzo pasado–, donde actuó con mucha lealtad y que nadie puede decir lo contrario.
Estos días, además, apareció un afiche en las calles de Santiago con una serie de figuras emblemáticas de la Concertación de centroizquierda, que gobernó Chile entre 1990 y 2010, junto a Tohá, con una leyenda que reza: “Las caras del pasado no resolverán los problemas que dejaron”. Junto al cartel, había otro, que decía: “Con Winter de frente al futuro”. Desde el comando del diputado del Frente Amplio -el partido de Boric- han descartado ser los creadores de esa propaganda, pero en el equipo de Tohá responden en privado que no están para esos juegos, sino para debatir el plan que tiene cada uno para Chile.
En debatir es donde están puestos hoy los esfuerzos de Tohá y en desplegarse en terreno. No van a reinventar la rueda de la candidatura presidencial que tienen en marcha, sino reforzar las estrategias que tienen para gobernar. Este miércoles, Tohá y Matthei discutirán sobre qué hacer para agilizar los permisos burocráticos para los proyectos económicos en un foro de Icare, y el jueves respecto al crimen organizado en la Cámara Nacional de Comercio y Turismo. El domingo se volverán a encontrar, esta vez con el resto de los aspirantes a La Moneda, en el primer debate televisivo organizado por Canal 13.
Si su desempeño mueve la aguja de los electores será un misterio, ya que a partir del sábado comienza el “silencio electoral”, sin encuestas, para que los ciudadanos mediten el voto antes de las primarias del 29 de junio, donde pueden votar los militantes de los partidos de izquierda y cualquier ciudadano sin domicilio político.
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